La empresa turca Aselsan demostró el sistema de armas láser móviles Gökberk contra drones FPV, que se han convertido en una amenaza crítica en los conflictos modernos. En la reciente prueba, la detección, el seguimiento automático y la destrucción de amenazas FPV en diferentes escenarios se llevaron a cabo con éxito demostrando su rápido tiempo de posición de disparo y su alta precisión. El Gökberk tendrá un papel fundamental en el sistema nacional de defensa aérea de Turquía, Steel Dome.
Este desarrollo es un paso relevante en el desarrollo de armas de energía dirigida por parte de Aselsan, que ya había probado su eficacia contra los drones kamikaze de ala fija y rotatoria. Ahora el sistema mostró sus capacidades avanzadas al detectar, rastrear de forma autónoma y eliminar los drones FPV en múltiples escenarios de prueba, demostrando una gran velocidad y precisión en el enfrentamiento.
Como componente crítico de Steel Dome, el Gökberk se destaca como un sistema de armas de defensa aérea de campo cercano que permite la destrucción de amenazas como mini/micro UAV e IED. Reúne la plataforma Ihtar de Aselsan y el arma láser en una plataforma con capacidad de despliegue móvil 6x6 en lugar de una arquitectura distribuida. Desarrollado con contribuciones de socios clave de la industria, incluido Tübitak Bilgem, todos los subcomponentes principales de Gökberk se han diseñado y producido en Turquía, lo que refuerza la autonomía de la industria de defensa del país.
El Gökberk utiliza una fuente láser propia con alta calidad de haz para la destrucción de objetivos por hard kill, al tiempo que proporciona destrucción por soft kill con un inhibidor electrónico desarrollado por Aselsan. El sistema puede realizar un seguimiento muy preciso del objetivo con varios sistemas electroópticos en la unidad de guía. Con algoritmos respaldados por inteligencia artificial, se maximizan las capacidades de seguimiento e identificación del sistema, lo que permite al Gökberk destruir las amenazas en el objetivo establecido en muy poco tiempo. Gracias al refrigerador diseñado para funcionar las 24 horas del día, los 7 días de la semana, puede disparar ininterrumpidamente durante mucho tiempo. El sistema, que crea el máximo impacto con la mínima potencia, se destaca como una solución rentable.
El Gökberk desempeñará un papel fundamental en la defensa de instalaciones fijas como bases militares, aeropuertos, centrales eléctricas y refinerías de petróleo, y tendrá una amplia gama de aplicaciones gracias a su capacidad de despliegue móvil. Con los datos obtenidos de las pruebas de disparo y los ensayos del Gökberk realizados en diferentes condiciones climáticas, continúa el trabajo de mejora y desarrollo del sistema.