En la reciente transmisión de mando presidencial, la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU) desplegó un operativo de seguridad y defensa aérea con tecnología de última generación. Gracias al apoyo de la empresa brasileña Advanced Technologies Security & Defense (ADTECH), se incorporó el dron Harpia, junto con otros drones del Servicio de Sensores Remotos Aeroespaciales, para monitorear y controlar la zona entre el Palacio Legislativo y la Plaza Independencia.
La compra se hizo a través de la empresa argentina VANTAC, representante para la región de ADTECH, que además coordinó el traslado del equipo desde Brasil.
El dron Harpía tiene una autonomía de hasta 12 horas, canales de transmisión encriptados y sistema anti-interferencia.
Además se exhibió un radar de detección e inhibición de drones Simad, adquirido a la misma empresa, para la identificación y neutralización de vuelos no autorizados.
Todo el operativo fue dirigido y controlado por el Centro de Operaciones Aéreas (COA). Y ejecutado por el Servicio de Sensores Remotos Aeroespaciales.
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