A partir de las 5 de la madrugada del sábado 12 de octubre de 2024, las Fuerzas Militares de Colombia lanzaron la Operación Perseo para la recuperación de la localidad de El Plateado, en el municipio de Argelia, en el sur del Cauca, una zona de fuerte presencia de las FARC y el ELN, donde además se concentra una gran producción de droga.
La operación se enfocó en atacar las fuerzas del Frente Carlos Patiño que conforma las disidencias de las FARC y mantenía el control de la localidad, aunque la zona estaba siendo también disputada por el ELN. Durante el día se pudo ver a grupos de guerrilleros huyendo de la localidad luego de algunas escaramuzas con el personal de la 3º División del Ejército de Colombia y la Policía Nacional. Además, la Fuerza Aérea Colombiana brindó apoyo a las acciones en tierra. Los guerrilleros atacaron a los militares con fuego de armas livianas, morteros y artefactos explosivos improvisados.
Las tropas del Ejército se desplegaron en blindados M1117, LAV III y Titan C, además de camiones y vehículos ligeros, así como por medio de helicópteros UH-60 Black Hawk.
La localidad de El Plateado se ubica en el Cañón de Micay y es considerada como el punto fuerte de las disidencias conocidas como Estado Mayor Central (EMC) comandadas por Iván Mordisco, a las cuales pertenece el Frente Carlos Patiño. Según declaró el presidente Gustavo Petro en Twitter, “por orden del presidente de la república y después de más de 5 años de dominio sobre el Plateado del EM, que convirtió la región en una bolsa internacional de la cocaína, entra el ejército de la Patria, de Bolívar, Nariño y Santander al Plateado. Hoy el Plateado es Colombia. A todos los campesinos del cañón del Micay, se les entragarán, después de la acción militar, el poder en la región, semillas de producción lícita y atención social del Estado”.
El Plateado es un pueblo de tan solo 8.000 habitantes que conecta a los municipios de Popayán y El Tambo con Belén de Guapi, un punto estratégico para el flujo de la coca por su salida hacia el Océano Pacífico, además de que el Cañón del Micay es la zona con más hectáreas de coca cultivadas en Cauca. Además, la localidad conecta de sur a norte los municipios de Argelia y San Juan del Mechengue hasta López de Micay.
Esta no es la primera vez que el Gobierno intenta ingresar a El Plateado para “recuperar el corregimiento”, lo cual se viene intentando sin éxito desde agosto de 2023. El baluarte de las disidencias de Iván Mordisco es uno de los lugares con más violencia en Colombia, dado que la ocupación histórica por parte de la guerrilla ha hecho que la presencia del Estado sea casi inexistente. Además del EMC también operan otras organizaciones residuales de las FARC y se cree que es el escondite de muchos comandantes de las antiguas FARC que decidieron volver a las armas tras la firma del acuerdo de paz de 2016.
En El Plateado los hostigamientos son constantes y los ataques con drones cargados de explosivos se han convertido en la forma más hostil de atacar a la Fuerza Pública y a la población civil. Uno de los casos más recientes fue la muerte de un niño de 10 años cuando los terroristas detonaron explosivos en una cancha de fútbol el 23 de julio pasado.
Según se indica, Mordisco controla los más de quince laboratorios de procesamiento de pasta base y las cuatro estaciones de combustible en los casi 150 kilómetros de camino de la zona.
Violencia creciente
En los últimos tiempos, la violencia ha recrudecido en Colombia, principalmente en manos de las disidencias de las FARC y el ELN, hoy dedicadas principalmente al narcotráfico y otras actividades criminales, dejando en evidencia el completo fracaso de los acuerdos de paz y las políticas llevadas a cabo tanto durante la administración de Juan Manuel Santos (quien esperaba el fin del conflicto a través de los acuerdos de paz) y de Gustavo Petro (quien redujo considerablemente el presupuesto de las Fuerzas Armadas y limitó su accionar hasta ahora).
