Hablamos con el Secretario de Lucha contra el Narcotráfico y la Criminalidad Organizada de la Argentina sobre cuál era el estado de situación en cuanto al crimen organizado y el narcotráfico en el país cuando asumió el cargo en diciembre de 2023, cómo está la situación regional y qué están haciendo para disminuir la criminalidad.
Por Santiago Rivas
El crecimiento del crimen organizado en América Latina, es el mayor problemas de seguridad que actualmente afecta a la región, ligado en gran medida al narcotráfico. En la Argentina, en el período entre el 2019 y 2023 se había eliminado la Subsecretaría de Lucha Contra el Narcotráfico, principal oficina dentro del Ministerio de Seguridad encargada de lidiar con esta problemática, la cual fue recreada en diciembre de 2023, dependiente de la nueva Secretaría de Lucha contra el Narcotráfico y la Criminalidad Organizada, a cargo de Martín Verrier, quien fuera Subsecretario de Lucha Contra el Narcotráfico entre 2015 y 2019. Hablamos con él para analizar el panorama que vive la Argentina y la región en cuanto al crimen organizado y qué escenario encontró a su regreso a la gestión.
Pucará Defensa: ¿Cómo encontraron la situación después de 4 años donde no hubo un organismo dentro del Ministerio de Seguridad enfocado a la lucha contra narcotráfico?
Martín Verrier: Una de las primeras decisiones que tomó la administración anterior fue, lamentablemente, disolver la Subsecretaría de Narcotráfico, que era la que actuaba como coordinadora del esfuerzo nacional contra el narcotráfico. Los resultados fueron inmediatos en el sentido negativo y en los dos primeros años se incautaron menos de 3000 kg de cocaína. Por decisión del presidente Milei y la ministra Bullrich no solo se recreó la Subsecretaría de Narcotráfico, sino que en la medida en que se decidió achicar la estructura del Estado, en coincidencia con esto se creó la Secretaría de Lucha Contra el Narcotráfico y la Criminalidad Organizada, que responde también a enfrentar al fenómeno de la convergencia criminal que es crecientemente el crimen organizado, que se está aliando, está confluyendo en sus diferentes metodologías y variantes y la idea es que el Estado responda de la misma manera. Entonces hoy vemos el terrorismo en muchos lugares aliados al crimen organizado, el narcotráfico, muchas veces vinculado a la trata, el tráfico de armas y la única manera de enfrentar eso es tener una estructura ministerial que responda de la misma manera. Y esto explica que hoy contamos con esta Secretaría que antes no existía.
La Subsecretaría de Narcotráfico sigue existiendo, está coordinada por el licenciado Ignacio Cichello, tiene las facultades que tenía anteriormente, incluyendo precursores químicos, pero ahora hay una Secretaría que tiene también una Subsecretaría de Investigaciones y Direcciones Nacionales encargadas de terrorismo, armas, contrabando, delitos ambientales, todas las variantes del crimen organizado, que en definitiva son las encargadas de coordinar y también monitorear el esfuerzo nacional contra estas amenazas.
PD: ¿Hoy cómo está la situación en la en la Argentina y la región?
MV: En la región es la continuación de ese escenario que veíamos hace un año https://www.pucara.org/post/seguridad-en-a-latina-estamos-en-el-peor-momento-del-avance-del-crimen-organizado-transnacional , que es la expansión del tráfico de drogas, con un impacto muy fuerte en Bolivia y Paraguay, pero donde aparecen nuevos países vulnerados por estas organizaciones criminales. En primer lugar, Chile, que históricamente estaba un poco a salvo de estas amenazas y hoy lamentablemente sufre el asedio del Tren de Aragua y toda la problemática asociada a esta organización criminal. Pero también nuestro vecino país Uruguay, que también era un país muy Pacífico, muy tranquilo y que hoy enfrenta bandas criminales, no solo locales y de baja intensidad sino de la ‘Ndrangheta italiana y la presencia de otros carteles muy importantes.
PD ¿Hoy cómo está la situación en Brasil, que tiene grupos como el Primer Comando Capital? Hay grupos muy grandes que incluso también están operando en Paraguay.
MV: Sí, el PCC ya está obviamente súper consolidado en Brasil. Esto explica que haya tratado de saltar al tráfico global. Recordemos que hace unos pocos años fue encontrado Fuminio atrapado por la DEA y por autoridades locales en Mozambique e intentando abrir los canales de tráfico hacia Medio Oriente. Y un poco eso también refleja esta nueva tendencia de abrir nuevos mercados, o sea no es más Estados Unidos el mercado más predilecto, sino que vemos que hay un fuerte incremento del tráfico en Europa, por un tema de lo que se paga, especialmente la cocaína, pero también el nacimiento de una ruta muy fuerte hacia el Pacífico.
Esto explica también por qué Chile está sufriendo lo que sufre. ¿Por qué aparece por primera vez el puerto de San Antonio, en Chile, por ejemplo, entre las rutas internacionales de cocaína? Lo mismo podemos decir, lamentablemente, de Montevideo, que aparece ya en los últimos años como un puerto de salida también de cocaína, a veces haciendo de tránsito del tráfico que sale de Paraguay. Y otras veces no, pero siempre con el PCC de fondo.
PD: En Asia, ¿Qué países son los que están creciendo más en consumo?
MV: China es hoy un mercado muy preciado, hay una clase media alta y alta pujante en China que es un mercado de destino objetivo de estas organizaciones criminales. Pero también el sudeste asiático y Oceanía, especialmente Australia y Nueva Zelanda, donde el kilo de cocaína puede llegar a 280.000 dólares, un kilo de cocaína que uno compra en la frontera a 2000 dólares. El spread y la ganancia es enorme.
PD: ¿En la región ha crecido el consumo? En Argentina o Chile.
MV: Eso es una muy buena pregunta a la cual lamentablemente no la puedo responder. A pesar de ser el Secretario de Narcotráfico, y esto tiene una explicación. Sedronar, que es la agencia encargada de hacer las encuestas de consumo, hizo la encuesta en 2017, la Encuesta Nacional que debería haber sido repetida en igual forma en la administración anterior y, a pesar de haber tenido la oportunidad de hacerlo, la administración anterior cambió la metodología, cambió las drogas que medía y por lo tanto es incomparable e incompatible con las todas las demás encuestas que se hicieron anteriormente. Con lo cual hoy no sabemos bien cuál es la evolución de la situación. ¿Qué pasó concretamente? Cuando Sedronar antes medía en una franja etaria el consumo de cocaína, marihuana, drogas sintéticas y otras drogas, la última administración que gobernó la Argentina entre 2019 y 2023, cambió la forma, modificó las edades sobre las cuales tomaba la muestra y solo midió marihuana y cocaína, perdiendo la oportunidad de medir el mercado de mayor velocidad de crecimiento, que es el de drogas sintéticas. Con lo cual hoy ese informe hay que tirarlo a la basura porque no sirve prácticamente para nada.
PD: Siempre se hablaba de que Argentina era un país de tránsito. Hoy, por el movimiento de la droga se ve que hay un consumo local mayor.
MV: Sí, el consumo local es muy fuerte y en muchos lugares se explica la instalación de estos carteles del microtráfico, estas bandas criminales explican la violencia. El lugar más paradigmático es el de Rosario. Nosotros en Rosario este año ya llevamos incautados 120 kg de cocaína exclusivamente para el microtráfico, para que el lector se dé una idea, 120 kg de cocaína son alrededor de 360.000 dosis, entonces es muy fuerte también el consumo interno de cocaína, que a veces está y no está asociado al tráfico internacional. En Rosario lo que vemos es que las organizaciones criminales que generan violencia tienen poco o nulo contacto con los grandes jugadores del narcotráfico global. Entonces son fenómenos más bien locales y que son los que generan violencia.
PD: ¿Hoy cómo está la Argentina en cuanto a la presencia de bandas internacionales como el Tren de Aragua, el Primer Comando de Capital?
MV: Hay presencia esporádica de algunas de estas organizaciones que pueden intentar generar algún tipo de alianza con alguna organización local que les facilite los servicios que necesitan para poder exportar cocaína. Hemos tenido un caso muy grande en Neuquén hace muy poco, 800 kg de cocaína incautados, donde suponemos que hay un jugador de estos grandes detrás. Hemos encontrado alrededor de 300 kg de cocaína en Rada La Plata, en un caso fallido de la organización criminal, porque teníamos información de que podían intentar y han abortado la operación, pero en esta operación buscaban insertar la cocaína dentro de un buque que estaba fondeado en las afueras del Río de la Plata, con lo cual en general operan de esta manera. No tenemos pruebas de que estén instalados, en el caso del PCC sabemos que sí, que han estado en contacto con algunas organizaciones locales, que tienen vínculos, pero no se han asentado en nuestro territorio para dominar las rutas.
PD: ¿Cómo ha crecido la producción en América latina? Porque era algo que la última vez que habíamos hablado venía creciendo fuerte, entre Bolivia, Perú o Colombia.
MV: Sí, ese crecimiento se mantiene, es decir, está estable en niveles super altos. Especialmente en el caso de Colombia, pero Perú, si bien produce menos cocaína que Colombia, la velocidad de crecimiento en producción es más rápida que la de Colombia. Entonces, de mantenerse esta tendencia, podríamos suponer que en 3 o 4 años Perú podría superar incluso a Colombia en volumen total. Eso altera absolutamente la dinámica del tráfico regional, porque toda esa producción tiende a tratar de ser exportada o canalizada hacia el sur, hacia el puerto de Santos, Montevideo, Villeta en Paraguay, Buenos Aires, Zárate, Rosario o San Antonio en Chile.
PD: En este sentido, ¿cómo ves el caso de Bolivia y Brasil?
MV: Brasil tiene el desafío de que, como es un país federal, como Argentina, tiene muchas agencias que tienen responsabilidad sobre esto y siempre es un desafío concentrar información. Con Bolivia el problema es de otra índole, que tiene que ver con la poca difusión que el gobierno mismo hace de estadísticas propias. Como única fuente de Bolivia tenemos los programas de Naciones Unidas y la Unión Europea que hacen estimaciones con fotografía satelital de áreas de cultivo. Y en ese sentido los últimos 8 años Bolivia tiene alrededor de 22 a 24000 hectáreas cultivadas de hoja de coca, de las cuales, por declaraciones oficiales del gobierno boliviano, entre 12000 y 14000 son usadas para consumo ancestral, con lo cual uno infiere que el resto son destinadas al mercado ilegal.
PD: ¿Cómo está hoy esta relación entre narcotráfico y el resto de las actividades que conforman el crimen organizado en el Cono Sur?
MV: Yo diría que es cada vez más importante. Otro de los fenómenos preocupante que es el de convergencia. Recientemente varios de los países de la región desarticularon células de Hezbollah que eran financiadas localmente. Puedo mencionar el caso de Brasil y el caso de Perú, estos fueron casos públicos, con lo cual no son cuestiones secretas. Y estamos muy atentos a lo que sucede en la triple frontera, en ese sentido, los mecanismos de financiamiento que utilizan en algunos casos son tradicionales y en otros no tan tradicionales. El narcotráfico principalmente, pero, por ejemplo, operativos que ha realizado Brasil recientemente han encontrado que una de las fuentes de financiamiento era la venta de cigarrillos electrónicos. No es tan raro, porque históricamente el tabaco era una fuente de financiamiento de Hezbollah.
PD: En cuando a drogas sintéticas ¿Cómo está la situación de la producción y tráfico en la región?
MV: Hay unos fenómenos nuevos. En Argentina no tenemos registrado que se produzcan drogas sintéticas, para producir drogas sintéticas se requieren precursores que en Argentina están bastante bien controlados después de un trabajo muy fuerte que se hizo entre 2015 y 2019. La Argentina en 2020 fue sacada del listado de países proveedores de precursores para el narcotráfico que hace el Departamento de Estado de Estados Unidos. O sea que hoy tenemos un sistema bastante bueno de control de precursores, pero sí se han encontrado plantas donde se transforma el estupefaciente que viene a granel en pastillas.
A nivel regional, estamos viendo cada vez más seguido drogas sintéticas desde Paraguay e incluso hemos visto que se han desarticulado laboratorios de drogas sintéticas en Encarnación, con lo cual estimamos que hay una ruta de tráfico de drogas sintéticas desde Paraguay hasta Argentina. Y estos sí son fenómenos nuevos que antes no teníamos, lo mismo que con los allanamientos y decomisos. Vemos cada vez más seguido la presencia de drogas sintéticas en allanamientos donde históricamente, por los lugares, solían ser cocaína y marihuana, barrios humildes o zonas carenciadas. Antes era muy raro encontrar drogas sintéticas ahí y ahora es más común, especialmente cocaína mezclada con ketamina o MDMA, vemos que la droga sintética tiene cada vez más penetración en la sociedad.
PD: ¿Esa droga es para consumo local o hay tránsito?
MV: No hay tránsito de esas drogas sintéticas, sí debo mencionar que hay un muy leve desvío de fentanilo legal. Hemos detectado algunos casos de desvío de fentanilo que es de producción legal, es una medicina, pero es desviado al mercado ilegal, transformándose en un delito. Ahí hemos visto el intento de traficarlo a otros países, a Chile especialmente, para el consumo en ese país.
PD: ¿Se ve un crecimiento del consumo de fentanilo?
MV: El Ministerio de Seguridad no mide adicciones ni consumo, pero por lo que nos dicen del sistema de alerta temprana del Sedronar, mecanismo del cual somos parte, no hay un consumo incipiente de fentanilo. Todavía es un nicho muy específico, generalmente vinculado a miembros de planta del área de salud, pueden ser anestesistas o médicos que han tomado contacto con la sustancia y han desarrollado un consumo problemático, pero estamos alerta de que esto cambie. Casos como el de Puerta 8, donde se encontró cocaína mezclada con fentanilo, no hemos encontrado más.
PD: Este año recién empiezan la gestión, pero ¿cómo ves el desafío hacia el futuro para seguir combatiendo el narcotráfico y el crimen organizado?
MV: Si bien en términos materiales nos encontramos con una situación muy compleja, porque, por ejemplo, el 40% de los móviles de Gendarmería estaba fuera de servicio. Prácticamente todo el parque de aeronaves de Gendarmería estaba fuera de servicio también. A partir de un trabajo muy fuerte que se está haciendo desde el área de administración del Ministerio, se está poniendo en funcionamiento el material existente, pero el recurso humano, que es lo más importante, está, tiene liderazgo y tiene respaldo. Tiene un objetivo estratégico, sabe que el presidente ha indicado que esta es una de las prioridades de la administración. Los resultados van llegando, hoy tenemos al día de hoy incautados 7800 kg de cocaína en lo que va del año y esto es un 80% más que el año pasado. Si seguimos esta tendencia va a ser probablemente uno de los dos años con mayor incautación de la historia argentina, con lo cual estamos logrando nuestro objetivo, que es volver más costoso y más riesgoso el negocio para el crimen organizado en la Argentina.