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Nuevas armas y capacidades para los Tucano del Paraguay

Foto del escritor: Joao Paulo Zeitoun MoralezJoao Paulo Zeitoun Moralez

Durante el acto por el 45 aniversario del Grupo Aerotáctico (GAC) de la Fuerza Aérea Paraguaya, realizado el 17 de enero, se presentaron una serie de novedades respecto de su flota de seis Embraer EMB-312 Tucano. Estarán recibiendo nuevas capacidades y aumentará el potencial de empleo del poder aéreo de ese país.


Foto: Antonio Luis Sapienza Fracchia

Habiendo adquirido sus primeros seis aviones en 1987 y registrados FAP 1051 a 1056, el AT-27 Tucano, como fueron designados, equipó el entonces recién creado 3° Escuadrón de Reconocimiento y Ataque “Moros” (hoy 3° Escuadrón de Caza “Moros”) con las escuadrillas “Gama” y “Omega” en la Base Aérea Luque/Ñu Guasu. Se recibieron con armamento convencional como bombas de uso general Mk 81/82, lanzadores para siete cohetes de 70 mm y cápsulas dobles de ametralladoras FN Twin MAG Pod, con dos balas MAG 58P y 500 de 7,62 mm.

Durante casi 40 años de operación, tres aviones se perdieron en accidentes, FAP 154, FAP 155 y FAP 156. Para compensar este desgaste, Brasil envió tres EMB-312 (FAP 157, FAP 158 y FAP 159) en noviembre de 2010 a cambio de un Boeing 707 y cuatro fuselajes AT-26 Xavante.

Hoy, con seis aviones, el país aumenta las capacidades operativas de su flota a la espera de la llegada de seis Embraer EMB-314 Super Tucano.


Ataque y reconocimiento

La atención del público presente durante los festejos del pasado 17 de febrero en la Base Aérea Ñú Guasú llamó la atención del Tucano FAP 157 con dos vainas de ametralladora calibre 50 pulgadas, el cual pertenecía a la flota de 10 AT-26 Xavante que operaba en ese país. Es la primera vez que estas cápsulas, desarrolladas por la ex Aermacchi, se ven instaladas en el Tucano. En este caso, en el colgador interno de las alas. Hasta hoy, sólo una fotografía difundida por Embraer mostraba esta posibilidad en el Tucano, pero sin que la cápsula estuviera realmente instalada.

La FAP realizó una modificación para unir el pod al soporte de armas en las alas. Actualmente se encuentra desarrollando las conexiones eléctricas y preparándose para las primeras pruebas de vuelo que deberían realizarse la próxima semana, ampliando así las capacidades de uso de ataque y apoyo aéreo cercano. En comparación con el FN Herstal Twin MAG Pod de 7,62 mm, esta nueva disposición proporciona una mayor potencia de fuego especialmente contra vehículos o uso armado en zonas rurales y selváticas, donde los árboles terminan siendo un obstáculo para municiones de menor calibre, como es el caso del 7,62 mm.



Otra novedad es que la FAP también adaptó el módulo de reconocimiento táctico del AT-26 Xavante. Con capacidad para transportar cuatro cámaras (frontal, vertical y dos laterales), el país sustituyó el equipo analógico W. Vinten Type 535 de fabricación inglesa por tres cámaras térmicas radiométricas Teledyne FLIR VUE PRO. Las imágenes de las cámaras se ven y graban en iPads que llevan los pilotos en la cabina. Hasta el momento se han realizado pruebas de vuelos diurnos, mientras la FAP se prepara para realizar vuelos nocturnos.

Con estas actualizaciones, la FAP pretende utilizar el Tucano en misiones aire-tierra, de reconocimiento y de entrenamiento de pilotos de combate, mientras que el Súper Tucano se utilizará para defender el espacio aéreo del país contra vuelos ilícitos que transportan armas, drogas y contrabando.



Modernización

Además de la integración de nuevas armas y sensores de reconocimiento, el país inició la modernización de sus seis unidades. Dos Tucano, uno de ellos el FAP 157, ya pasaron por el proceso que incluyó la instalación de una suite Garmin GTN 650 (que combina GPS, comunicación y navegación); ADS-B GTX 345R; instrumento electrónico de vuelo GI 275 AI con indicador de actitud, horizonte y rumbo; GI275 HSI; panel de audio GMA 340; GTX345R ADS-B ENTRADA/SALIDA; y garmin GI 275 ADAHRS con GMU 11, Clase I/II.

Los trabajos de modernización están a cargo de la empresa paraguaya Aerocentro, con personal técnico especializado en aviónica y electrónica de GAC, quienes están recibiendo transferencia de tecnología para realizar los trabajos de forma autónoma desde el tercer AT-27. En promedio, el costo por avión para los dos primeros ejemplares es de US$80 mil dólares, valor que debería ser menor a partir del tercer AT-27.




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